Una vez más, el invierno está a la vuelta de la esquina. Además del clima más frío y los días más cortos, la depresión estacional puede apoderarse de uno y afectar el estado de ánimo y la productividad. Los síntomas comunes de la depresión invernal incluyen falta de energía, cansancio, cambios en el apetito y aumento de peso. Todos estos son factores que pueden afectar la salud al entrar en los meses más activos, creando un ciclo de malos hábitos. Es importante mantenerse al día con el invierno antes de que se apodere de uno. Aquí hay algunos consejos útiles de los expertos en fitness y gimnasios en casa de Lifespan Fitness.
Mantén tu rutina
Las rutinas estructuran nuestras vidas, algo que puede ser muy saludable. Aunque a veces puede resultar fácil dormir hasta tarde con el sol, seguir una rutina estable durante el invierno puede ofrecer enormes beneficios. Mantenga la misma hora de acostarse y de despertarse durante todo el año. Reserve un bloque de tiempo específico cada día para hacer ejercicio. También es bueno mantenerse algo ocupado para evitar caer en hábitos cómodos.
Intenta salir al exterior (aunque haga frío)
Resulta que los humanos no nacimos para estar encerrados todo el día, sin importar la estación del año. Los estudios han demostrado que tan solo 15 minutos bajo el sol pueden reducir el estrés y aumentar los niveles de energía. Incluso si hay nieve en el suelo, unos minutos al aire libre cuando brilla el sol pueden hacer maravillas.
Invierta en equipos de gimnasio para el hogar
A medida que más personas trabajan desde casa, aumenta la necesidad de distracciones saludables en el hogar. Además, cuando nieva y las carreteras se vuelven resbaladizas, a muchas personas les resulta más difícil ir al gimnasio de forma constante. Por esos motivos, los equipos de gimnasia para el hogar, como las máquinas de remo, las cintas de correr o incluso los escritorios con cintas de correr, pueden ser un punto de inflexión durante el invierno.
Tómese un descanso (razonable) durante las vacaciones
Seamos honestos, no hay nada peor que llegar al Día de Acción de Gracias o a un fin de semana festivo de diciembre contando calorías y evitando por completo esos dulces que tanto nos gustan. Si bien nunca es recomendable comer en exceso, especialmente en el lapso de varios días, está bien darse un capricho de vez en cuando. Solo asegúrate de mantener tu rutina y no abandonar los buenos hábitos.
Reemplace el tiempo libre con pasatiempos productivos
Durante el invierno es mucho más fácil adoptar un estilo de vida más relajado. Intenta combatirlo desarrollando nuevos pasatiempos, ya sea en interiores o al aire libre. Prueba a esquiar, aprende a tocar un instrumento, lee un libro o empieza a cocinar comidas saludables. Haz lo que sea necesario para mantener tu mente ocupada y activa durante la mayor parte del día posible.
Gestionar el sueño
El sueño tiene una gran influencia en la salud y el bienestar general. Curiosamente, dormir demasiado y no lo suficiente puede tener efectos similares en la vida cotidiana. Asegúrate de que tu horario sea bastante constante y de dormir entre 7 y 9 horas por noche.
Mantener las redes sociales
Puede resultar fácil quedarse en casa y aislarse cuando hace frío y nieva afuera. Sin embargo, es importante para la salud mental salir de vez en cuando e interactuar/socializar en público. Las investigaciones muestran que al interactuar con otras personas en persona, en realidad entrenamos a nuestros cerebros para que conserven recuerdos y se protejan contra las enfermedades neurodegenerativas. Pasar un rato con amigos ayuda mucho.
Conclusión
Los próximos meses pueden requerir un poco más de esfuerzo por parte de algunos que de otros en lo que respecta a mantener una buena salud. Dicho esto, algunas medidas sencillas pueden marcar una diferencia considerable a nivel físico y mental. Trate de formar y mantener hábitos saludables, apéguese a su rutina, socialice siempre que sea posible y utilice los equipos del gimnasio en casa . Están ahí para ayudar.